Cuando la vida de las mujeres se quedan estancadas o se llenan de aburrimiento, es hora de que emerja la mujer salvaje; es hora de que la función creadora de la psique inunde el delta… del libro de Clarissa Pinkola.
Y fue así que decidimos que ya era hora de hacernos más presentes en todos los ámbitos y henos aquí, la mujer mexicana ha llegado a la cima, con muchas posibilidades de que nuestro país tenga una Presidenta al mando.
En un país donde aún impera el machismo, donde existen familias en donde aún la mujer no puede decidir que ropa ponerse o con quien casarse, donde las mujeres sufren vejaciones, malos tratos y violencia en todas sus formas. Aquí en nuestro México, dos mujeres y un hombre van a competir en una elección que se ha llamado “histórica” porque además se ha invertido mucho más recursos y dinero que en años anteriores.
Tomando en cuenta ese posible escenario tanto Cluaudia Sheibaumn como Xochilt Gálvez, se perfilan para suceder en el cargo al primer mandatario del país, lo que dentro del marco del Día de la Mujer toma relevancia porque lejos de los discursos que se le dan a las mujeres cada año de que pueden aspirar a lo quieran, en materia de política esto solo se reservaba a algunos puestos que como ya dijimos se daban o bien para cumplir una regla o para hacer una “Juanita” que luego sería sustituida en su encargo como alcaldesa por ejemplo por su pareja o un familiar.
Ahora la situación se ve distinta porque las dos candidatas se han ganado su lugar por méritos en el caso de Claudia Sheinbaum el trabajo que hizo al frente de la CDMX, y el manejo mediático que tuvo provocó que a lo largo y ancho del país se le conociera, situación que la llevó a ser la favorita en las encuestas desde un año antes en que Morena, decidieran hacer la selección de su candidato. Esto ocasionó que la gente al conocer las actividades que realizó como jefa de gobierno muchos respaldaran su aspiración lo que la llevó a ser la ganadora de la encuesta de Morena, ganando a políticos de la talla de Marcelo Ebrard.
Lo mismo pasó con Xóchitl Gálvez, nadie le regaló la candidatura que hoy ostenta y aunque no estaba en los últimos años al frente del gobierno de alguna localidad, si llamó su atención como opositora desde el poder legislativo, que poco a poco fue construyendo una estrategia de ser la primer mujer que desde la oposición retó al presidente, no solo con gritos y discursos llenos de acusaciones de que todo está mal en el país sino que llegó hasta la confrontación frontal al pedir un debate cara a cara en las mañaneras, lo que le sirvió para que el mismo titular de la presidencia la destapara, cosa que los partidos de oposición notaron, ya que la gente que no concuerda con la actual forma de gobierno se comenzó a identificar con Gálvez Pérez.
Indiscutiblemente hay una agenda pendiente de temas del sector femenino, de mejorar las políticas públicas, de buscar la justicia para las mujeres que han sido violentadas, mejorando el sistema de justicia en México, con reformas a las leyes, con encontrar a los hijos desaparecidos de las madres buscadoras, con terminar con la brecha salarial entre hombres y mujeres en este país, ¿está pensando lo mismo que yo? , habrá una luz al final del túnel de que México ¿pueda cambiar?.
Hoy aspiramos a ver un México donde se pueda conmemorar un 8 de marzo sin tener que dar malas noticias de más mujeres muertas, no solo basta con llevar un discurso de que se puede tener la primer mujer presidenta para que las féminas voten por alguna de ellas, sino que tiene que haber una agenda de género, yo confío y espero ver ese México que todas las mujeres anhelamos y que este país, esté dentro de la lista de países, donde las mujeres pueden vivir más felices, más seguras y con más oportunidades de empoderarse.
Por: Sandra Villafuerte