El fin de semana ocurrió un accidente fatal en una de las entradas a la ciudad de Villahermosa, en donde un autobús de más de 20 pasajeros se volteó y su peso aplastó el techo por completo, quedando la gente atrapada, en donde 4 personas perdieron la vida.
Lo anterior me hizo recordar un día cuando veníamos de regreso por la carretera, específicamente manejando en dirección a Villahermosa Tabasco desde Frontera. Oscurecía, había tráfico moderado, cuando de manera súbita a uno de los camiones que venía hacia nosotros, se le zafó la llanta de uno de sus ejes, la cual se dirigió hacia nosotros por lo menos a una velocidad de 50 km/hr y dando saltos de hasta 2 metros de altura. Todo fue tan rápido que mentiría si dijera que la trate de esquivar, pero para nuestra suerte el bólido se impactó en el punto donde se encuentra el faro derecho de nuestro auto, rompiéndolo y deformando toda esa sección la cual requirió una reparación mayor. Pasado el acontecimiento, me orille, revisamos el daño y nos pusimos a pensar qué hubiera pasado si se hubiera impactado en el lugar del copiloto (mi esposa) o por el contrario, en el del piloto (yo), tal vez perdiendo el control, chocando y quedando sin vida.
Todos los días hay accidentes en nuestra ciudad o en las carreteras de acceso a las mismas. Los que son inverosímiles o inexplicables en su mayoría son por mala conducción y/o por falta de las señales correspondientes en piso o cruceros; pero otros muchos en su mayoría son por exceso de velocidad y por manejar bajo el efecto del alcohol.
¿Pero por qué ocurre todo esto?. Mi respuesta sería: LA CONDESCENDENCIA (Complacencia, indulgencia, tolerancia, transigencia, deferencia, beneplácito, anuencia, delicadeza, benevolencia)*.
¿Porque CONDESCENDENCIA?. En carreteras, si se sigue permitiendo que cualquier conductor de vehículo vaya a la velocidad que quiera, un descuido o una falla seguirán provocando accidentes. Si se permite que personas en estado de ebriedad continúen su camino después de ser detenidos, de seguro se pondrán en riesgo y también a otras personas que van manejando a esa misma hora.
Con mi historia quiero dejar claro que un accidente nos puede ocurrir a cualquiera en cualquier momento, pero se pueden reducir si manejamos por debajo de los límites de velocidad, si revisamos llantas, amortiguadores y otros componentes críticos de nuestro auto; pero sobre todo que los vehículos que transportan pasajeros y cargas pesadas, cumplan con el reglamento correspondiente a la conducción y al programa de mantenimiento que deben realizar.
Necesitamos SENSIBILIZACIÓN Y DISCIPLINA por parte de los ciudadanos con cargo. Sensibilización a través de campañas (todos los días) de buenas prácticas al manejar, de nuestras obligaciones y responsabilidades de no conducir en estado de ebriedad, por debajo de los límites de velocidad y respetando al peatón; disciplina multando a conductores que vayan a exceso de velocidad, que se estacionen en lugares prohibidos como son lugares y rampas para personas discapacitadas; aplicar el alcoholímetro de manera obligatoria y diaria a choferes de transporte público y foráneo en diferentes puntos de la ciudad y carreteras; revisar que la carga de los vehículos de transporte esté por debajo de los límites permitidos y lograr así además de la seguridad, que nuestras carreteras se mantengan en buen estado.
La utilización de espectaculares, periódicos, radio, televisión y redes sociales es fundamental; que el personal de seguridad pública y vialidad utilicen tecnología actualizada para revisar la información correspondiente a una placa o número de serie; que puedan emitir multas de manera electrónica para que sean pagadas de manera forzosa antes del pago del refrendo, cambio de placas o cualquier otro trámite de gobierno.
CIUDADANOS CON CARGO, LAS ACCIONES, EFECTOS Y CONSECUENCIAS HABLAN POR SÍ SOLAS. MENOS ROLLO, MENOS IMPUNIDAD, MENOS CONTAMINACIÓN, MÁS DISCIPLINA, MÁS EDUCACIÓN, MÁS SALUD E INFORMACIÓN COMPROBABLE. TODOS VAMOS A VOTAR.
Por: Alejandro Frías
FOH