Los hombres necesitan hacer casi el doble de ejercicio físico que las mujeres para obtener los mismos beneficios cardiovasculares, según ha constatado un estudio del Instituto de Corazón Smidt de Los Ángeles, recogido este lunes en el Journal of the American College of Cardiology.
Los investigadores analizaron los datos de actividad física realizada por 412 mil 413 adultos, el 55 por ciento de ellos mujeres, en el periodo 1997-2019 procedentes de la Encuesta Nacional de Salud de Estados Unidos.
Los investigadores examinaron los resultados específicos de género en relación con la frecuencia, la duración, la intensidad y el tipo de actividad física, llegando a la conclusión de que las mujeres obtienen más beneficios para la salud cardiovascular con el ejercicio que los hombres.
Los investigadores analizaron también la actividad física aeróbica de moderada a intensa, como caminar a paso ligero o montar en bicicleta, y descubrieron que los hombres alcanzaban su máximo beneficio de salud cardiovascular haciendo este tipo de ejercicio cinco horas a la semana, mientras que las mujeres lograban lo mismo con dos horas y media semanales.
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En lo que respecta a las actividades de fortalecimiento muscular, como el levantamiento de pesas, los hombres alcanzaron su máximo beneficio realizando tres sesiones a la semana y las mujeres obtuvieron la misma ventaja con aproximadamente una sesión a la semana.
Según Cheng, las mujeres obtenían beneficios aún mayores si realizaban más de dos horas y media a la semana de actividad aeróbica de moderada a intensa, o dos o más sesiones semanales de actividades de fortalecimiento muscular.
Teniendo en cuenta todos los tipos de ejercicio y todas las variables, los científicos confirmaron que los hombres obtienen un beneficio máximo de supervivencia cuando realizan 300 minutos de actividad moderada a vigorosa a la semana, mientras que las mujeres obtienen la misma ventaja con 140 minutos.
Los investigadores señalan que sus hallazgos ayudan a trasladar el antiguo reconocimiento de la fisiología específica del sexo observada en el laboratorio de ejercicio a una visión ahora ampliada de las diferencias de sexo en los resultados clínicos relacionados con el ejercicio.
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POR: JTG