Activistas de Greenpeace robaron este lunes 2 de junio la estatua de cera del presidente francés Emmanuel Macron del famoso museo Grévin, en una acción de protesta contra los vínculos económicos de Francia con Rusia. La figura, valorada en 40.000 euros, fue posteriormente colocada frente a la embajada rusa en el distrito 16 de la capital francesa.
Según fuentes policiales, los responsables del robo fueron dos mujeres y un hombre que se hicieron pasar primero por turistas y luego por empleados del museo. Cubrieron la figura con una manta y escaparon por una salida de emergencia sin ser detectados en el momento.
«Fue una operación quirúrgica», declaró una fuente cercana a la investigación. Poco después del robo, un individuo se comunicó con el museo para asumir la autoría del acto en nombre del movimiento Greenpeace.
La estatua, que representa a Macron durante su mandato presidencial, estaba ubicada entre las figuras de Angela Merkel y Donald Trump. El museo Grévin, fundado en 1882 y conocido por sus figuras de celebridades nacionales e internacionales, no había registrado un robo similar en años.
Durante la protesta frente a la embajada rusa, los activistas desplegaron pancartas, una bandera rusa falsa, señales de tránsito alteradas y la figura de cera del presidente. La sonriente estatua del presidente se ubicó junto a una pancarta con el lema «Ucrania se quema, el negocio continúa», en protesta contra las exportaciones de gas y fertilizantes desde Rusia.
La acción fue realizada como parte de una campaña para denunciar el comercio de empresas francesas con Rusia, pese al conflicto armado entre Rusia y Ucrania que continúa desde febrero de 2022.
Jean-François Julliard, director de Greenpeace Francia, justificó la acción señalando que Macron «debería ser el primero entre los líderes europeos en poner fin a los contratos comerciales con Rusia». Según Julliard, el presidente francés mantiene un «doble discurso» al apoyar públicamente a Ucrania mientras permite negocios con Moscú.
La figura fue retirada poco después por las autoridades, y se espera que el museo evalúe los daños y determine si podrá restaurarla. La estatua de cera está valuada en 40.000 euros.
En medio de este incidente, Emmanuel Macron también ha estado en el foco público por motivos personales y políticos. En las últimas semanas han circulado videos virales que generaron controversia: uno donde se lo ve en un tren rumbo a Kiev, presuntamente involucrado en una situación ambigua, y otro que muestra a su esposa, Brigitte Macron, empujándolo durante su llegada a Vietnam, lo que provocó especulaciones sobre una posible situación de violencia doméstica. Ambos hechos fueron desmentidos por el presidente francés.
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