«Esto es de primera línea. Esto es lo mejor que puedes conseguir en lo que se refiere a vehículos. El departamento de policía es el mejor que hay en el país», afirmó Jones.
Según Christophe Bess, oficial de información pública, los métodos tradicionales de reclutamiento ya no son suficientes, por lo que la innovación y la creatividad se han convertido en el enfoque principal para atraer a un público más amplio y diverso.
Aunque algunos ciudadanos expresaron escepticismo y preocupación por el uso de recursos, se aclaró que todos los costos asociados con el proyecto fueron cubiertos por Braman Motors y que la ciudad de Miami Beach no incurrió en gastos.
Además de su función como herramienta de reclutamiento, este vehículo podría verse como un reflejo de la estrecha relación entre Norman Braman, propietario de Braman Motorcars, y la sociedad de Miami, ya que ha realizado donaciones y patrocinios en la ciudad.
Si esta estrategia logrará su objetivo de atraer a futuros agentes de policía con un alto sentido de dedicación y profesionalismo, solo el tiempo lo dirá. Pero es innegable que, por ahora, ha captado la atención por ser el primer patrullero Rolls-Royce del mundo.
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