En las últimas semanas, en diferentes zonas de la Ciudad de México ha habido reportes de presencia de chinches. Estos pequeños insectos pueden ser muy resistentes y difíciles de encontrar, además, pueden invadir nuestras prendas de vestir, situación que ha generado preocupación en la sociedad.
La chinche de cama es un insecto pequeño, de color café, aplanado, que se alimenta solo de sangre de animales y humanos. Las chinches adultas miden alrededor de medio centímetro, son ovales y de color marrón, informó la Universidad de Kentucky.
“Las chinches de cama se transportan en el equipaje, la ropa, las camas, el soporte de madera del colchón, etcétera. El uso de camas, sofás, y muebles de segunda mano es una buena manera de transportar las chinches de un lugar a otro”, aseguró.
La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos explicó que una sustancia bioquímica que puede ayudar a combatir las chinches es el aceite de neem, pues al prensarlo en frío se convierten en el único pesticida bioquímico que puede combatirlas.
“El aceite de neem prensado en frío se extrae directamente de las semillas del árbol Neem, un árbol tropical perenne que se encuentra en el sureste de Asia y África. El aceite contiene varios compuestos que tienen propiedades insecticidas y medicinales”, aseveró.
“También se utiliza para la fabricación de productos como el shampoo, la pasta dental, jabones y cosméticos. Las pruebas de rendimiento realizadas en los valores aprobados de la etiqueta muestran que ambos productos controlan las chinches adultas, las ninfas y los huevos”, agregó la Agencia.
En ese sentido, lavar la ropa con un jabón que contenga este aceite podría ayudar a eliminar la presencia de estos animales en las prendas de vestir.
Actualmente, en el mercado mexicano hay jabones de barra y líquidos que cuentan con este producto natural; su precio puede variar entre los 40 pesos y hasta los 400, dependiendo del tamaño y la presentación.
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