Este 17 de enero, en la Catedral del Señor de Tabasco, feligreses acudieron a la misa del mediodía para que sus mascotas recibieran la bendición de San Antonio de Abad, patrón del ganado y los animales. Niños, jóvenes y adultos llevaron a sus perros y gatos, considerándolos parte de sus familias.
Durante la homilía, el presbítero Aurelio Hernández recordó las palabras de San Antonio Abad, quien afirmaba que los animales son «compañeros del camino» y que la creación de Dios sirve para acercarnos a Él.
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Con la ayuda de un monaguillo, el presbítero se acercó a la entrada de la Catedral para bendecir a los animales, mientras los fieles formaban una fila para que ninguno quedara sin la bendición.
San Antonio de Abad es invocado para proteger al ganado, especialmente por aquellos que dependen de los animales para su sustento, como ganaderos y carniceros. La tradición establece que, cada 17 de enero, los animales deben recibir esta bendición.
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KCQ
