El día de ayer, el ex Presidente Andrés Manuel López Obrador publicó un vídeo de casi 50 minutos a propósito del lanzamiento de su nueva obra literaria intitulada “Grandeza”, la cual aborda una exposición sobre las culturas precolombinas que habitaban el país. El escenario de su presentación fue desde su quinta, en Palenque, Chiapas, llamada “La Chingada”.
Si bien es cierto que la razón de este ejercicio de comunicación gravitó discursivamente sobre su nuevo libro, no se debe pasar por alto que en política “forma es fondo”, así como también, que el ex mandatario cuenta con talentos sobrados de ritmo político para definir la agenda pública.
Este comentario obedece a la pretensión de este columnista para desentrañar el verdadero mensaje e intención que ocupó la mente del rostro más representativo de la denominada “Cuarta Transformación”.
En un principio, considero al acto como una manifestación de respaldo absoluto a la actual Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, pues en repetidas ocasiones le asigna méritos de la “Mejor Presidenta del Mundo”.
Este elogio, difícil de conocer si fue pedido o autorizado por la beneficiada del cumplido, llega en un momento peculiar, al pasar casi 1 año de la toma de protesta, una caída simbólica en la popularidad del gobierno actual, el cambio del Fiscal General de la República, las vísperas del anuncio de la reforma electoral más trascedente desde 2014, comentarios expresos del Presidente norteamericano Donald Trump de estar dispuesto a mandar tropas a territorio nacional y un debate a medio acabar sobre cambios profundos en la revocación de mandato.
En síntesis, el ex Presidente mexicano de nueva cuenta, en su calidad de ideólogo máximo y “líder moral” del partido, invita a la comunidad en general para apoyar a la Jefa de Estado, pero estimo, que instruye a los miembros de Morena a cerrar filas de lealtad con ella, a fin de disciplinar algunos rumores y acontecimientos que cuentan con la soberbia de reclamarse autonomía e insinuar con sus conductas una mejor forma de hacer las cosas que la primera mujer Presidenta de la República, pues a su dicho, aún es “temporada de zopilotes”.
Cabe destacar que igualmente constante fue la indicación, tanto en su sexenio como en el video de casi 50 minutos de ayer, que no participaría más del protagonismo público, pues a según su afirmación, “no le haría sombra a la Presidenta”.
En este orden de ideas, la parte final del video de Andrés Manuel se afanó por delinear lo más relevante a mi juicio de su mensaje, al revelar las reglas de excepción a su promesa de retiro perpetuo de la actividad política una vez que terminara su mandato.
Las reglas de excepción para el regreso desde “La Chingada” a las calles de la acción política son 3, a saber: 1) Un atentado contra la Democracia, como un fraude electoral; 2) Un “golpe de Estado” o agresión al gobierno de la Doctora Sheinbaum; y 3) Un atentado a la “Soberanía de México”;
Las 3 razones anteriores gozan de cualidades altamente polémicas, no solo por introducir la sugerencia del regreso del activo más preciado de Morena, sino por lo que representaría para México el acontecimiento de cualquiera de esos 3 escenarios.
En este orden de ideas, advierto que debemos actualizar las variables del pronóstico político local, y modular la expresión “retiro o jubilación” de este importante actor político, pero más sobresaliente es, que quien funge como el mayor estratega político y jugador electoral más exitoso en lo que va de este siglo, lleve al imaginario colectivo las expresiones “fraude electoral”, “golpe de Estado”, “agresión a la Soberanía”. No pasa desapercibido que las 3 figuras constituyen circunstancias de alta inestabilidad política.
El tiempo dirá si las alusiones a estos supuestos de procedencia para la reactivación política del ex mandatario son simples comentarios de sus reflexiones, o anticipan algún evento en la república, al cual se le asignaría un manejo de crisis que precise del uso de estas denominaciones.
Finalmente, queda atestiguar que, mientras la figura principal causante del resultado en las urnas en los últimos 2 sexenios se da el lujo de acaparar las portadas de los diarios nacionales con un video sobre la grandeza cultural de los pueblos originarios, México espera que la denominada oposición -cualquier cosa que esto signifique- se comprenda que el partido ya empezó.
Así, deseo un sano ejercicio de interacción entre la actual administración y la llamada oposición, a fin de que le vaya bien a la primera para el desarrollo de la nación; y a su vez, exista astucia en la segunda, para que coadyuve al progreso nacional con su sana y oportuna crítica que establezca una alternativa racional.
POR: Eduardo González




