Un aparente ataque israelí contra la única iglesia católica de Gaza mató a dos personas e hirió a varias, dijo el jueves el Patriarcado Latino de Jerusalén.
«Dos personas murieron como resultado de un aparente ataque del ejército israelí que impactó el Complejo de la Sagrada Familia esta mañana», dijo el Patriarcado en un comunicado.
La Iglesia de la Sagrada Familia en Gaza informó en una declaración separada de «varios heridos, algunos en estado crítico».
En un telegrama dirigido a las víctimas, el Papa León XIII dijo que estaba «profundamente entristecido» y pidió «un alto el fuego inmediato». El Papa expresó su «profunda esperanza de diálogo, reconciliación y paz duradera en la región», según el telegrama firmado por el Secretario de Estado del Vaticano, cardenal Pietro Parolin. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) afirmaron estar «al tanto de los informes sobre los daños causados a la Iglesia de la Sagrada Familia en la ciudad de Gaza y las víctimas en el lugar. Las circunstancias del incidente están bajo revisión».
«Las Fuerzas de Defensa de Israel hacen todos los esfuerzos posibles para mitigar el daño a los civiles y las estructuras civiles, incluidos los lugares religiosos, y lamentan cualquier daño causado a los mismos», añadió el comunicado.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel declaró en un comunicado sobre X que se publicarían los resultados de la investigación. También indicó que el país no había atacado iglesias ni lugares religiosos y lamentaba los daños causados a estos o a civiles. El Patriarcado había dicho anteriormente que entre los heridos se encontraba el párroco, padre Gabriel Romanelli, y que su iglesia había sufrido daños.
El padre Romanelli, argentino, solía mantener informado periódicamente al difunto papa Francisco sobre el conflicto israelí-palestino mediante llamadas y mensajes. Imágenes de Reuters desde el hospital lo mostraban con heridas leves, con la pierna izquierda vendada, pero capaz de caminar. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, culpó a Israel por el ataque al complejo religioso.
«Los ataques que Israel lleva meses llevando a cabo contra la población civil son inaceptables. Ninguna acción militar puede justificar semejante actitud», afirmó en un comunicado.
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