La Fiscalía federal del Distrito Sur de Nueva York cargó este martes contra la defensa del rapero Sean Combs, conocido como Diddy, por colaborar el primer día de su juicio por tráfico sexual con un famoso abogado ajeno al caso que debatió sobre el mismo en su pódcast.
En un documento presentado hoy ante la corte, los fiscales señalan que el lunes, durante la selección del jurado, el equipo de la defensa llevó sin avisar a Mark Geragos, un abogado que tiene un pódcast con el director del medio de la farándula TMZ, Harvey Levin, llamado ‘2 Angry Men’ (‘Dos hombres enfadados’).
La Fiscalía incide en que, hace solo tres días, Geragos, que cuenta con 55.000 seguidores en X, habló «extensamente» sobre el juicio en este pódcast, opinando sobre pruebas que podrán aportarse en el proceso e indagando en los argumentos que la defensa del rapero pretende esgrimir.
«Durante un juicio con jurado, ningún abogado asociado con la defensa puede hacer declaraciones extrajudiciales o entrevistas sobre el caso», apuntan los fiscales, que además se quejan de que Geragos, padre de uno de los miembros del equipo de Combs, no notificó formalmente su aparición en la corte.
El abogado también estaba presente hoy en el tribunal, donde el juez Arun Subramanian preguntó a más de una veintena de candidatos sobre su conocimiento del caso y experiencias más personales, como si han sido víctimas de abuso sexual o violencia doméstica.
El juez ha advertido estos días a los potenciales jurados que durante el juicio podrán proyectarse imágenes «gráficas» de violencia física y videos sexuales explícitos, ante lo que una de las candidatas dijo que sería incapaz de ver este material, por lo que fue excluida del proceso.
Además, ha preguntado a los asistentes sobre si conocen a una lista de celebridades, entre ellos Kanye West, Kid Cudi, Michael B. Jordan o Mike Myers.
Entre los candidatos descartados hoy se encontraban un hombre que reconoció que no fumar marihuana durante el juicio le resultaría «difícil», además de una veterana de guerra que dijo que, por esta experiencia «traumática», no podría ser parte del panel.
Combs, uno de los raperos estadounidenses más famosos del país, enfrenta cinco cargos de tráfico sexual, conspiración con fines de extorsión y transporte para ejercer la prostitución, y si es declarado culpable de todos ellos enfrenta una pena máxima de cadena perpetua.
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