Recientemente, la presidenta Claudia Sheinbaum afirmó que Tabasco ha experimentado un descenso en el número de homicidios, una noticia positiva para uno de los estados más afectados por la reciente ola de violencia. El descenso fue distinto según los municipios, con Centro siendo uno de los más beneficiados.
Disminución de la violencia
Según información oficial, el aumento en el número de elementos del ejército fue uno de los motivos principales para el descenso en la violencia, con hasta 300 efectivos adicionales siendo reubicados al estado. Mientras que la caída en los homicidios habría alcanzado el 28% a nivel estatal, municipios como Centro registrado un descenso de hasta 85%.
Otro golpe contra la violencia en el estado fue el operativo “Halcón Ciego”, que logró el desmantelamiento de un entramado de cámaras de vigilancia y repetidores utilizados por grupos criminales para monitorear distintos municipios de Tabasco. Uno de los usos principales de estos equipos era vigilar a las fuerzas de seguridad para poder operar con mayor impunidad.
Adicionalmente, el gobierno de Tabasco firmó una serie de acuerdos con el gobierno de Chiapas para llevar a cabo estrategias de seguridad interestatal, con las autoridades teniendo la potestad de continuar investigaciones independientemente de los límites territoriales de la mano de fuerzas de seguridad vecinas.
Afirman que esto tendría un impacto en casos donde los criminales opten por cambiar de estado para evadir la justicia.
Por último, la reorganización de las fuerzas del orden, un aumento en la inversión en inteligencia y distintas reuniones con grupos civiles, han permitido identificar con mayor precisión algunas de las principales causas de la violencia en Tabasco, asegurando el desarrollo de estrategias mucho más efectivas de cara al corto y mediano plazo.
Pymes, un sector afectado
Aunque la violencia generalizada parece experimentar un descenso, el sector privado seguiría viéndose afectado por una ola de robos, con las pequeñas y medianas empresas (pymes) siendo víctimas frecuentes tanto de ladrones que operan de manera independiente, como de grupos de crimen organizado.
Las cifras más recientes revelan que el porcentaje de empresas que han sido víctimas de delitos ha incrementado de manera estable en los últimos años, con el aumento más alto conocido (27,2%) ocurriendo en el 2023. Según las estadísticas, la extorsión y el asalto serían los delitos perpetrados con mayor frecuencia contra el sector.
¿Qué pueden hacer las empresas?
El descenso en la criminalidad, aunque positivo, podría no ser suficiente para muchos negocios, por lo que es recomendable que estos lleven a cabo medidas adicionales para disminuir las probabilidades de ser víctimas de los criminales. Algunas estrategias efectivas para cumplir con este objetivo incluyen:
- Vigilar: el aumento en la vigilancia sigue siendo primordial para estos negocios, no solo incluyendo personal de seguridad para la protección del establecimiento y la mercancía, sino también dispositivos de videovigilancia para disuadir a los criminales y crear los registros necesarios para interponer denuncias que brinden resultados tangibles.
- Limitar el ingreso: el control de acceso para empresas es parte esencial de un entramado de seguridad eficaz, ya que permite controlar quienes ingresan y salen de las instalaciones en cualquier momento. Estos pueden ir desde barreras físicas, hasta sistemas electrónicos basados en credenciales e información biométrica.
- Asegurar: no existe medida de seguridad que sea totalmente impenetrable, por lo que es necesario contar con los seguros adecuados, tanto para proteger la vida, como la mercancía y la integridad del negocio. De acuerdo a voceros de la Asociación Mexicana de Agentes de Seguros y Fianzas (AMASFAC), apenas el 16% de las pymes de Tabasco están aseguradas. Puede que a simple vista no sea una inversión atractiva para muchos negocios, sin embargo, puede hacer una diferencia importante en la operatividad del negocio en caso de ser víctimas de un delito.
- Denunciar: aunque la denuncia suele ser vista como una acción de poca utilidad, e incluso peligrosa en algunos casos, la realidad es que se mantiene como la única forma de asegurar que las autoridades lleven a cabo acciones tangibles. Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) afirman que, en algunos estados, hasta el 90% de los robos no son denunciados de forma adecuada. En conjunto con alertar a la policía y otros cuerpos de seguridad pertinente, denunciar de forma precisa es capaz de generar presión en las autoridades, especialmente en momentos donde estas buscan apoyos de la población local.
México atraviesa momentos complejos en materia de seguridad, con hallazgos como el del Rancho Izaguirre mostrando que todavía queda mucho por hacer. Sin embargo, golpes de timón como el que se llevó a cabo en Tabasco son señal de que es posible realizar mejoras tangibles de la mano de las estrategias adecuadas.










