En un dramático evento, efectivos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, de la Cruz Roja y de Protección Civil lograron el rescate de un masculino, que se encontraba desde lo alto de un espectacular de 10 metros de altura, ubicado sobre la avenida Ramón Mendoza, en Tierra Colorada.
Todo comenzó cuando, a las doce y media del día, se reportó la presencia un hombre, de aproximadamente 30 años de edad, que se localizaba en la parte superior de un anuncio.
Minutos después, los efectivos de la paz y el orden arribaron hasta el punto para iniciar con la labor de convencer al joven de que desista de una posible decisión de tirarse. ‘Sergio’, como en un principio fue conocido, se notaba desperdigado, hablando sin sentido y notablemente confundido.
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‘Sergio’ tuvo que soportar los intensos rayos del sol y un calor intenso que rayó los 35 grados centígrados, mirando fijo hacia el parque central de la colonia.
A pesar que uno de los elementos de la SSPC insistió amablemente que descendiera de ese arriesgado lugar, el joven hizo caso omiso a las reiteradas peticiones de bajar del espectacular. Y así transcurrieron las horas.
Cerca de las cuatro de la tarde, la presidenta de la asociación “Juntos ayudando a salvar vidas”, Eli Rosado, arribó hasta el lugar de los hechos. Se propuso apoyar al cuerpo de rescate en su papel de terapeuta, a fin de fortalecer las labores de convencimiento. Tras media hora, la especialista bajó del puente sin éxito.
“Aparentemente, la persona está bajo el influjo de una sustancia; aparentemente tiene un delirio paranoide. Él está confundido de la realidad, de lo que está pasando. Según de lo que pudimos platicar, probablemente tenga alucinaciones auditivas que le indican que está en peligro y eso es lo que entorpece el proceso de rescate”, expuso, al tiempo de admitir que el hecho que la gente le gritara consignas como “ya bájate”, “ya tírate” o “aviéntate ya”, lo aturdía más de su condición.
Pero no todo eran consignas, también estaban las peticiones de apoyo moral como “Dios te ama; bájate, hijo”, “no te va a pasar nada, bájate”, “todo va a estar bien”.
Pero nada funcionó.
Fue hasta las cinco y media de la tarde, cuando un rescatista del heroico cuerpo de bomberos, subió hasta la cúpula para ejecutar el plan B: rescatar al joven.
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Con una finura para ejecutar su acción de rescate y con la fuerza para sostenerlo, se logró la misión; no sin antes, haber sufrido horas de tensión pues ‘Sergio’ estuvo –en muchas ocasiones- a punto de caer del puente ante su resistencia inconsciente de ser rescatado.
Pese al estira y afloje – y tras romper parte del espectacular para extraerlo, se logró su captura para luego ser atendido por miembros de la Cruz Roja.
Por: Alicia Mateos (WCLS)
