Un arancel es una cantidad que se debe pagar por concepto de impuestos, contribuciones, tasas o derechos. La cantidad a pagar se establece en base a un porcentaje que se aplica al valor del producto que se desea importar, es decir, que traemos a México y lo fija nuestro gobierno. Cuando exportamos un producto a otro país, el porcentaje del arancel lo fija el país al cual estamos enviando nuestros productos.
Los aranceles se utilizan para proteger a los productores nacionales, aplicando aranceles a los productos que vienen de otros países. De esta manera los productos nacionales se pueden adquirir a menor precio que los que vienen de importación, protegiendo la cadena de suministro y los empleos que corresponden.
Los aranceles regulan el comercio internacional y mediante su aplicación se equilibra la balanza comercial con los demás países, es decir, que se busca que la suma de las exportaciones que realicemos a un país determinado, sean similares a la suma de las importaciones que provengan de ese mismo país.
En esta ocasión decidí hablar sobre los aranceles, porque el tema domina los encabezados nacionales debido a que el gobierno de E.U.A., pretende aplicar una tasa de aranceles generalizada y excesiva a todos los productos que enviamos desde México a ese país. A continuación les comparto una serie de datos para que tengan una perspectiva de la magnitud de esta imposición:
De acuerdo con “The Office of the United States Trade Representative”, el intercambio comercial de México con EUA fue de 839 mil millones de dólares; EUA le exportó a México 334 mil millones de dólares, mientras que México le exportó a EUA 505 mil millones de dólares. Lo anterior muestra que la balanza está a nuestro favor y parece ser que esto es lo que utiliza Donald Trump como pretexto para la imposición del 25% de aranceles a todos los productos de México.
Sin embargo, de acuerdo con la fuente “Barclays”, los autos de la marca Ford utilizan un 25% de componentes hechos en México, Canadá y otros países diferentes a EUA, Stellantys un 45%, Nissan y General Motors un 50%, Toyota un 52%, Hyundai y Kia un 70% y Volkswagen un 80%. De llegar a aplicarse la tasa de arancel propuesta por Trump, el costo de los autos de estas marcas subiría considerablemente, lo que provocaría la reducción de las ventas de los mismos en ese país. (Los porcentajes son aproximados).
Por el momento la imposición de la tasa del 25% de aranceles por parte de Trump está en pausa, pero en cualquier momento el u otro país, nos pueden aplicar tasas de aranceles mayores. Lo anterior es una señal inequívoca de que como mexicanos, tenemos que ampliar nuestra oferta de productos para nuestro consumo local y para ofrecerlos a otros países; debemos de ver hacia otros mercados tanto para exportar como para importar productos. Como dice mi padre: NO PONGAS TODOS LOS HUEVOS EN LA MISMA CANASTA.
Columna por Yesi Frías










