Cuauhtémoc Blanco Bravo, exgobernador de Morelos, finalmente rompió el silencio luego de que el ahora extitular de Fiscalía General del Estado (FGE), Uriel Carmona Gándara, presentó una solicitud de desafuero en su contra ante el Congreso de la Unión.
Fue la tarde de este 7 de febrero, en conferencia de prensa, cuando el ahora diputado federal negó rotundamente haber cometido el delito de violación en grado de tentativa por el que se le imputa; y mismo por el cual ayer se interpuso una solicitud de desafuero.
“Debo dejar en claro que niego rotundamente el delito que se me imputa. A lo largo de mi vida, tanto en mi trayectoria deportiva como en mi desempeño como servidor público, siempre he actuado en el centro del marco legal, respetando los derechos humanos y la dignidad. Es preocupante que en lugar de actuar de manera objetiva y conforme a la ley, se utilicen estos procedimientos con fines que podrían tener un trasfondo político”, declaró.
Ante medios de comunicación, señaló a Carmona Gándara de encabezar una persecución política en su contra y advirtió que “ya estuvo bueno” que lo “agarren como piñata”.
“Debo dejar en claro que niego rotundamente el delito que se me imputa. A lo largo de mi vida, tanto en mi trayectoria deportiva como en mi desempeño como servidor público, siempre he actuado en el centro del marco legal, respetando los derechos humanos y la dignidad. Es preocupante que en lugar de actuar de manera objetiva y conforme a la ley, se utilicen estos procedimientos con fines que podrían tener un trasfondo político”, declaró.
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